La temporada de mandarina Orri está llegando a su fin, pero antes de que se agoten las últimas existencias ¿qué os parece si preparamos un delicioso bizcocho?
Aprovechemos todas las posibilidades que esta agradable fruta nos ofrece en la cocina y disfrutemos de ella en sus diferentes versiones.
Además, este bizcocho se queda super esponjoso y a los niños les encanta. Todo el sabor de lo tradicional con un toque de cítrico que no os dejará indiferentes.
¿Te animas a probarlo?
Ingredientes:
- 3 mandarinas Orri
- 3 huevos
- 150 gr. de azúcar
- 250 gr. de harina
- 100 gr. de leche
- 80 gr. de mantequilla o aceite de oliva
- 10 gr. de levadura
- Azúcar glas para adornar (opcional)
1. En primer lugar, con las mandarinas bien lavadas, rallamos la piel, intentando rallar solo la parte naranja ya que la parte blanca es más amarga. Reservamos.
2. El resto de la mandarina, le quitamos todo lo posible la parte blanca sobrante y las trituramos. Reservamos.
3. En un bol ponemos los huevos y el azúcar y batimos hasta que quede una masa homogénea y blanquecina.
4. Añadimos la leche y el aceite y mezclamos. Acto seguido vamos añadiendo la harina con la levadura, poco a poco, mientras vamos mezclando todo muy bien hasta conseguir que quede una masa sin grumos.
5. Cuando esté todo bien batido, es el momento de añadir la ralladura de mandarina y las mandarinas trituradas y mezclar todo muy bien hasta que queden totalmente integradas en la masa.
6. Vertemos la masa en un molde previamente engrasado con un poquito de aceite y lo metemos al horno que previamente habremos calentado a 180º.
5. Horneamos a 180º, con calor arriba y abajo, durante 40 minutos aproximadamente. Antes de sacarlo del horno, puedes comprobar si está hecho por dentro, introduciendo un palito de brocheta por ejemplo. Si no sale manchada, tu bizcocho está listo.
6. Lo sacamos del horno y lo dejamos enfriar sobre una rejilla. Cuando se atempere, podremos desmoldarlo.
7. Por último, espolvoreamos el azúcar glas por encima y un poquito de cáscara de mandarina rallada. ¡A disfrutar!
