El verano es, por excelencia, la estación más esperada de todas todo un año programando ese viaje tan deseado, una escapada al pueblo para ver a la familia, momentos para descansar y programar el último cuatrimestre y un largo etcétera, entre el que se encuentra comer de forma abundante y darse los caprichos que, de una forma normal, no hacemos.
Por todos es conocida la operación bikini o bañador, para llegar en forma al verano, pero, ¿qué ocurre cuando se acaba el verano? ¿dejamos de preocuparnos por nuestra alimentación? Tras los excesos en comidas, cenas y bebidas, es momento de tener en cuenta algunos alimentos que pueden favorecer la reducción de la hinchazón tras el verano, y los mejores aliados son las frutas y las verduras.
Una dieta ha de ser equilibrada, aportando todos los nutrientes necesarios para el correcto funcionamiento de nuestro organismo. Nosotros no podemos dejar de incluir los cítricos en nuestra alimentación, en concreto la mandarina Orri, de la que tantas veces te hemos hablado de sus beneficios para la piel o el cabello, entre muchos otros.
A continuación, te ofrecemos unos consejos para que los apliques a tu dieta tras los excesos de verano, que te ayudarán a seguir una alimentación más baja en calorías, más sana y a depurarte:
· Incluye alimentos ricos en Vitamina C, ya que es la vitamina perfecta para desintoxicar nuestro organismo de forma interna. Es altamente recomendable tomar a diario una buena ración de esta vitamina para poder limpiar bien tu cuerpo. Los cítricos o los vegetales de hoja verde son fuentes muy interesantes de este nutriente.
· Aporta vegetales a todos tus platos para conseguir saciar tu apetito y llenar tu organismo de nutrientes esenciales y pocas calorías. Intenta que todas tus comidas cuenten con una porción vegetal y tu cuerpo te lo agradecerá.
· Toma alimentos diuréticos, que te ayudarán a eliminar toxinas y residuos mediante la orina. Son los más ricos en agua, por ejemplo: apio, pera, pepino, espárragos, alcachofas, sandía, etc.
· Toma alimentos ricos en fibra, son los más recomendados para saciar el apetito y, al mismo tiempo, te ayudará a depurar el cuerpo gracias a que mejora el tránsito intestinal.
· Bebe agua, agua y más agua. Aumenta el consumo de agua al día y prueba tomar 2 litros. Si no eres capaz, incluye infusiones en tu dieta para que puedas tener un aporte extra de agua sin darte ni cuenta.
· Apuesta por las frutas como tentempié. No hay nada mejor que paliar el hambre que surge entre horas tomando piezas de frutas, ya que te aportan vitaminas y minerales muy beneficiosos, pero además también son bajas en calorías y ricas en fibra.
· Toma proteínas ligeras. Puedes comer carne y pescado, pero aconsejablemente las partes ligeras del animal y, sobre todo, que los métodos de cocción sean bajos en grasas. Apuesta, por ejemplo, por pollo a la plancha o lenguado al horno.
· Reduce el consumo de hidratos y déjalos mejor para el desayuno o el almuerzo, evitando incluirlos en la merienda o cena.
· Practica deporte, elige la modalidad que más te divierta y dedica una parte de tu tiempo libre a cuidarte y a depurar las toxinas acumuladas.